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El autoproclamado profeta Athos Salomé dice que sistemas como ChatGPT “facilitan la comunicación con lo desconocido”
El autoproclamado profeta Athos Salomé, conocido como el “Nostradamus viviente“, ha confirmado las predicciones de Elon Musk sobre la inteligencia artificial (IA) y emite una severa advertencia sobre la “invocación del trabajo del diablo” mediante la tecnología.
Salomé describe la IA como “demoníaca” y sostiene que el dueño de Tesla y CEO de Twitter estaba en lo cierto cuando afirmó hace casi una década que la tecnología estaba convocando fuerzas oscuras. En el Simposio del Centenario de 2014 del Departamento de Aeronáutica y Astronáutica del MIT, Musk advirtió que los sistemas de inteligencia artificial podrían ser más peligrosos que las armas nucleares, afirmando: “Con inteligencia artificial, estamos convocando al demonio.
Sin embargo, dos años después el propio Elon Musk apostaba por la IA cofundando e invirtiendo en OpenAI, creadora del ya archiconocido ChatGPT. Ahora, incluso, ha anunciado la creación de su propia empresa de IA tras considerar que los objetivos sin ánimo de lucro de OpenAI fueron desvirtuados.
El psíquico brasileño hace referencia al trabajo de la física mexicoamericana Jimena Canales, autora del libro “A Shadow History of Demons in Science”. Canales examina cómo, a lo largo de los siglos, los científicos han utilizado entidades imaginarias, o demonios, en experimentos mentales para poner a prueba las leyes de la naturaleza y ampliar las fronteras de lo posible.
En declaraciones al Daily Star, Salomé asegura que estos “demonios” suelen ser similares a los seres humanos, pero con características exageradas. Aunque pueden ser útiles, también pueden ser maliciosos, lo que fundamenta su advertencia en contra del desarrollo de la ciencia y la tecnología.
“Facilita la comunicación con lo desconocido”
“Pocas personas saben de la existencia de ‘demonios’ para cada arte, incluyendo la ciencia y la tecnología, ese es el mayor problema de la ‘inteligencia artificial’, están facilitando la comunicación con lo ‘desconocido’“.
Salomé afirma que en este caso, la palabra “demonio” proviene de “daemon”, que se refiere a espíritus naturales con aspectos humanos. Aunque no necesariamente se consideraban buenos o malos, los antiguos griegos creían que la influencia de estos seres mitológicos podía tener efectos tanto positivos como negativos.
“Daemon fue pensado como un espíritu humano superior, como si fuera la parte más profunda de nosotros”, agregó Salomé. “Para los antiguos griegos, los Demonios no eran seres separados de la vida humana sino que eran una parte integral de la naturaleza. Para algunos filósofos griegos, por ejemplo, la Felicidad no sería más que estar bajo la influencia de un buen Demonio”.
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